Entrevista a José Sánchez-Montes

Publicado: 06/06/2007

David López entrevista a José Sánchez-Montes, director del Festival de Granada Cines del Sur, que este sábado 9 de Junio inaugura su primera edición.

Para comenzar, creo que lo más obvio sería preguntarte por el origen del proyecto. ¿Cómo nace el Festival de Granada Cines del Sur?

El Festival de Granada Cines del Sur surge por una propuesta que nos hace el Presidente de la Junta de Andalucía, cinéfilo declarado, a un equipo de gente del cine. Esta propuesta se hace a través de la Consejería de Cultura de la Junta y lo que querían era organizar en Granada un festival internacional de cine, que completase la oferta ya existente en Andalucía (por ejemplo, el Festival de Cine Español de Málaga o el Festival de Cine Europeo de Sevilla). Parecía sensato dedicarlo a unas cinematografías que no estuviesen presentes en esos festivales. Y así es como nace.

Como seña de identidad, este festival se centrará en las cinematografías de África, Oriente Medio, Asia e Iberoamérica. Estas producciones, que en ocasiones se engloban bajo el epígrafe “cinematografías periféricas, son unas grandes desconocidas para la mayoría del público y parecen sólo objeto de debates y reflexiones por parte de la prensa y los festivales especializados. En ese sentido, ¿por qué se asume este riesgo a la hora de programar?

A mí me gusta mucho el término “periférico”, que acuña en su momento sobre todo Alberto Elena, programador del festival, porque creo que es el más adecuado, mucho mejor que “cinematografías emergentes”, algo que ha quedado muy anticuado. Que el público pueda ver películas que normalmente escapan de los circuitos comerciales tiene una virtud, y es que enriquece. Entonces el riesgo que tiene programar películas que no sean de Hollywood está descontado de antemano. Si nosotros podemos hacer del Festival de Granada un espacio en el que sucedan cosas diferentes a las habituales, pues nos damos por satisfechos.

¿Cómo valoras el grueso de estos trabajos?

Creo que hasta donde yo conozco ha habido una gran variación de niveles, lenguajes o contenidos. Hablar de las cinematografías del Sur es hablar del cine de Bollywood, una cinematografía muy comercial; reflexionar sobre el cine chino, con un continuo crecimiento en cuanto calidad, cantidad y posibilidades de comercialización; o encontrarse con el cine magrebí, una producción con muchas dificultades y un concepto autoral muy intimista. Sobre todo estamos ante una producción muy variada.

El festival, ¿se ha planteado algún objetivo a largo plazo?

Sí. Nuestro sueño es conseguir que en tres años el festival se convierta en un espacio en el que se sigan viendo las mejores películas de la cosecha de la temporada, pero además que empiece a convertirse en un lugar de intercambio comercial audiovisual del Sur, con este Norte del Sur que somos nosotros. Para eso estamos trabajando muy en serio en la posibilidad de crear un espacio en el que se pueda hacer negocio cultural y audiovisual. Creo que éste es el objetivo más importante.

Centrándonos ya en la programación, querría resaltar esa inauguración en un marco incomparable como es el Palacio de Carlos V de la Alhambra.

Para nuestro gusto, vamos a tener una inauguración muy apropiada, en sintonía con la programación que estamos tratando. Será un encuentro en el que por supuesto habrá unas palabras por parte del festival de agradecimiento a la ciudad y a todos los que han hecho posible el festival. Se proyectará un pequeño corte de todo lo que van a ser las distintas secciones y también se hará entrega del homenaje a Youssef Chahine, que no puede estar por problemas médicos, pero que recogerá el agregado cultural de la embajada de Egipto. Y finalmente proyectaremos la película “La boda de Tuya”, un film emblemático de lo que puede llegar a ser el cine del Sur, porque cumple con todos los requisitos que puede tener un título de gran calado. Además, ganadora del Oso de Oro en el Festival de Cine de Berlín demostrando el nervio y el músculo que tiene hoy día el cine oriental.

¿Cuáles han sido los criterios para incluir una obra en la Sección Oficial Competitiva?

Para que una película esté en la Sección Competitiva del Festival se supone que has de cumplir una normativa muy específica que se puede encontrar en el reglamento. Tiene que ser estreno exclusivo nacional, no puede haberse visto antes en España. Eso ha excluido a muchas películas excelentes. Por ello, los quince títulos a concurso nunca se han visto en este país. No hay ninguna otra norma a priori. El comité de selección ha estado visitando festivales de todo el mundo, desde Pusán a Rotterdam. Había incluso películas que sabíamos que iban a comenzar a montarse y ya estábamos contactando con sus directores. Es el gran lujo de este festival y este tipo de programación. Te estoy hablando de un equipo estupendo, con Moisés Salama como coordinador general, y Alberto Elena y Casimiro Torreiro como directores de programación, auxiliados por Esteve Riambau y María Luisa Ortega.

Luego tenemos una Sección Complementaria - Informativa llamada Itinerarios. Que nadie piense que se trata de un apartado menor dentro del programa, pues incluye el estreno europeo de la nueva película de Abbas Kiarostami, el documental “Roads”, así como coproducciones y títulos de realizadores consagrados como Tsai Ming-liang o Apichatpong Weerasethakul.

La Sección Itinerarios tiene una ventaja enorme, y es que ésta sí que nos da libertad. Podemos proyectar películas vistas en otros festivales o que por motivos de distribución no pueden estar en la Sección Oficial. Por ejemplo, tendremos títulos como “Opera Jawa”, que se ha visto en España, y que nos permite realizar proyecciones para un mayor público en la Plaza de las Pasiegas, lugar idóneo para films de gran calidad y muy asequibles.

Una marca de los festivales son sus retrospectivas y homenajes. En su primera edición, el festival cuenta con dos retrospectivas que irán acompañadas por sendas publicaciones.

Digamos que las retrospectivas para este año estaba claras desde hace dos años y medio. Cuando empezamos a hablar, una de las retrospectivas iba a ser la de Youssef Chahine, porque es un director que además de su cualidad cinematográfica, se le añade su propia personalidad, que casa con lo que debe ser el espíritu del cine del Sur. Chahine es un director de 82 años, católico en un país árabe, muy enraizado en la tierra en la que nació. Tiene una filmografía variopinta de una gran calidad. Era necesaria una gran retrospectiva de uno de los padres del cine árabe.

En cuanto a cine chino, parecía interesante hacer una retrospectiva de los últimos diez años de las “generaciones urbanas”, con directores que ya tiene un reconocido prestigio internacional, como Zhang Yuan o Wong Kar-Wai. Esta retrospectiva hace justicia a una sorprendente producción en la que incluso encontramos títulos que no son oficiales y que están prohibidos en China. Es la seña de apertura del festival.

¿Se apostará por la actualidad o tendrán cabida los clásicos en futuras ediciones?

En la Sección Oficial y la Sección Itinerarios no tiene sentido porque se trata de apostar por lo nuevo, pero desde luego la intención de las retrospectivas es que sigan dando este repaso lo más amplio posible, que ya iremos modificando y mejorando en futuras ediciones. Pero desde luego, la intención es conseguir que en la ciudad se vayan generando otro tipo de encuentros, como el que celebramos en Noviembre sobre los directores de El Magreb.

El jurado de esta primera edición es de auténtico lujo. ¿Cuáles han sido los parámetros para esta elección?

Buscábamos lo que hemos conseguido pero lo hemos buscado a través de mil vericuetos. Claro, conseguir que una personalidad como Jafar Panahi pueda venir pues es muy complicado. Tiene que coincidir que no tenga ningún festival o ninguna película en desarrollo o postproducción. Y eso con cada uno. Hicimos un listado muy amplio de posibles candidatos. Evidentemente, vas eliminando nombres, a veces por descarte, a veces por diversidad. No queríamos un jurado en el que sólo hubiese directores o tan solo actores. O sólo de una determinada región. Por eso hemos jugado con esa variedad propia del festival y los cines del Sur haciéndolo lo más abierto posible. Tenemos un representante importante del cine africano, una actriz argelina prestigiosa, un director chino que contará con dos trabajos en la retrospectiva sobre lo último de la producción china o al director de un festival indio que nos dará una visión espléndida del otro cine realizado en esta región.. Para el jurado podríamos haber ido scando figuras muy conocidas para el público. No es algo que critique, tenemos que jugar con todas las armas posibles, pero en este caso había que marcar un territorio.

Esta programación cinematográfica se complemente con toda una serie de actividades paralelas.

Las actividades paralelas del festival son, en realidad, una invasión de la ciudad de Granada. Este festival es un festival de largometrajes, sin hacer distinción entre ficción o documental, entre celuloide o vídeo. Pero nos parecía que había otras muchas artes olvidadas que merecían estar presentes. Así surge la muestra de videocreación “Geopoéticas”, que está en el Centro José Guerrero desde el día 5 de Junio, o una exposición de 45 fotografías panorámicas de Nuri Bilge Ceylan en el Rey Chico. Estamos trabajando en unos talleres de creación audiovisual para inmigrantes cuyos trabajos se proyectarán sobre edificios de la ciudad las noches del festival. Sin olvidar la estupenda programación musical que ha seleccionado Enrique Novi, o esa carpa que nos cede el Ayuntamiento y que vamos a llenar de proyecciones del seminario que se está preparando sobre la imagen del inmigrante en la España actual incluyendo encuentros con asociaciones de inmigrantes. Por otro lado, destacaría el encuentro de directores de festivales de Andalucía, que tendrá aquí su asamblea, donde se presentará un premio que se va a otorgar a partir de ahora, esperando que se haga una declaración de apoyo al propio Festival Cines del Sur. Y algo que para mí es trascendental es esa reunión con algunos directores de festivales del Sur, con el objetivo de crear ese espacio de intercambio del que hablábamos anteriormente.

Una medida, sin lugar a dudas muy popular, es mantener bastante bajo el precio de las entradas. Sobre todo ese abono para 15 pases al precio de 20 euros.

Hemos discutido mucho sobre el precio de las entradas. Estamos manejando básicamente dinero público y me parece que éste debe servir para enriquecer a los contribuyentes y su capacidad de acceder a la cultura. No podríamos declarar gratuitas las actividades porque era minusvalorarlas y creo que es algo que no se debe hacer nunca. Tampoco podíamos situarlo en los precios comerciales al uso. Por eso, hacer entradas a tres euros me parece bastante sensato. Además de los cinéfilos, que pensamos que comulgan con nuestras creencias y serán posiblemente devotos del festival, tenemos en Granada una población joven y universitaria, así como una población inmigrante. Nos interesa que el festival vaya creciendo gracias a su público, por lo que debemos procurar estar abiertos a todo tipo de audiencia.

Si no me equivoco, la mitad de la recaudación en taquilla irá destinada a Cruz Roja y sus proyectos de ayuda y cooperación internacional.

Efectivamente. La mitad de la recaudación bruta va a ir destinada a Cruz Roja pero además, para que no se quedase en un gesto puramente testimonial, creamos en el convenio una cantidad mínima que tenga cierta relevancia. Aunque el festival tenga más o menos éxito, Cruz Roja tiene asegurada una cantidad fija.

Por mi parte, nada más, puedes añadir lo que quieras.

Diría que uno de los aciertos del festival es su campaña de promoción. A mí me gusta mucho el lema de la campaña, “compartiendo emociones”, porque creo que es ahí donde está el corazón del festival, en esas emociones universales.

Muchísimas gracias por estos minutos. En nombre de Séptimo Vicio os deseo todo el éxito que sea posible durante estos días. ¡Mucha suerte!

Muchas gracias a ti. Yo creo que la suerte es la de todos.